Año 2010. Mar del Plata, Buenos Aires, Argentina.
Esqueletos de simetría castrense a la espera del verano.
Pálidos palotes, añoran en orden el jaleo de otros meses.
Algún caminante ermitaño, alguna gaviota distraída.
Tal vez unos enamorados jocosos o contemplativos.
Poco, muy poco. Migajas del pandemónium estival.
Firme sobre la costa, la paciente hermandad del poste.
Estoicos frente al viento. Impasibles al sol, la lluvia o la arena.
Sólo el tiempo, empecinado, demora el inicio de la temporada.
Tiempo corruptor, invita a la termita de la inquietud.
Pero los maderos, disciplinados,
saben disimular.
La foto parece un dibujo sobre papel madera!!! Tranquilidad de la geometría y el protagónico del poste, lapiz que dibuja. Muy bueno, me gustó mucho.
ResponderEliminarA diferencia de otras entradas, aquí el disparador exclusivo fue la imagen; la memoria puntual del momento no intervino. Es una leve distinción pero creo que de allí surge el ligero cambio de tono y temática.
EliminarGracias por el comentario.